Doce monos (Twelve Monkeys – Terry Gilliam – 1995)
Año 2035. La superficie del planeta está contaminada y lo que queda de la humanidad se ve forzada a permanecer recluida bajo tierra para poder sobrevivir. El responsable: un virus, un destructivo agente patógeno liberado en 1996 que sólo resulta nocivo a los humanos y que ha terminado por convertir el planeta en una gigantesca reserva natural.
Si vivir bajo tierra es ya de por sí difícil, estar encarcelado, en esta época, es todo un reto. Bien lo sabe James Cole, un convicto que alterna sus días de reclusión con jornadas explorando la superficie exterior, un gélido mundo donde los animales campan a sus anchas. Y es que, desde que aquel virus acabara con la mayor parte de la especie humana, los animales se han adueñado de los vestigios de la civilización industrial y son ellos quienes ahora reinan en la superficie del planeta.
La misión es bien sencilla, Cole debe obtener una muestra biológica que permita a los científicos entender por fin cómo revertir los efectos del virus, pero sus esfuerzos son siempre infructuosos. Con los años el virus ha mutado y, sin la cepa original, sintetizar un antídoto es un trabajo estéril. El consejo científico debe buscar una alternativa, dar un paso más arriesgado: ¡viajar en el tiempo hasta 1996 para descubrir cómo se liberó el virus y obtener una muestra para su posterior estudio!
Aunque hay un pequeño inconveniente: ninguno de los que han intentado viajar en el tiempo con anterioridad ha regresado estando en sus cabales, pero ¿qué alternativa tiene un hombre convicto como Cole si quiere cumplir su condena? Una vez en destino, los viajeros están solos sin ningún tipo de apoyo y únicamente podrán comunicarse con el futuro llamando a un número de teléfono y dejando un mensaje en el contestador automático.
Así es cómo empezará la misión de Cole, investigando uno de esos mensajes, una grabación que relaciona la propagación del virus con el misterioso ejército de los «Doce monos».
¿Son ellos los responsables de la extinción del hombre sobre la tierra, cómo liberaron el virus, y por qué?
No te pierdas esta magnífica y trepidante película en la que nada ni nadie es lo que parece.
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